El extremo sur del continente se encuentra bajo la influencia económica y política de la República Sudafricana. Este país, que se vio sometido a un sistema de gobierno racista, el apartheid, hasta principios de la década de los noventa, es la gran potencia económica y militar del continente africano y los países de su entorno inmediato (Namibia, Botswana, Lesoto y Swazilandia) constituyen una extensión económica de Sudáfrica.

La República Sudafricana cuenta con importantes recursos industriales, energéticos, agrícolas y ganaderos, pero es la producción de oro, uranio y diamantes la que constituye la base de su próspera economía. La población del área es mayoritariamente de raza negra, pero existe una importante minoría blanca, sobre todo en Sudáfrica y Namibia, que detenta el poder económico y, hasta la supresión del apartheid, también el político.

Países

Botswana, Lesoto, Namibia, Sudáfrica, Swazilandia