12 de abril de 2016

Sesión académica a cargo del Embajador Atilio Molteni, organizada por el Comité de Asuntos Africanos, de los Países Árabes y Oriente Medio

Por Candelaria Bergero

El Embajador Molteni analizó el rol de Arabia Saudita e Irán dentro del escenario actual de Medio Oriente, región caracterizada "por ser hoy día el lugar en el mundo donde está el conflicto abierto más peligroso, que tiene una evolución constante y con un costo humanitario enorme".

Molteni detalló la existencia de cuatro etapas en el proceso histórico de Medio Oriente. Primero, la región estuvo absorbida por el Imperio Otomano. Luego, tras la caída del mismo al finalizar la Primera Guerra Mundial, Francia e Inglaterra se dividieron los territorios y formaron protectorados. El tercer período estuvo caracterizado por la creación del Estado de Israel y el surgimiento del nacionalismo en la región, todo esto en el marco de la Guerra Fría. Finalmente, el Embajador destacó la fase existente entre 1989 y la segunda invasión estadounidense a Irak, recalcando aquí el debilitamiento hegemónico de Estados Unidos (aunque no su desaparición).

Medio Oriente es el lugar en el mundo donde está el conflicto abierto más peligroso, que tiene una evolución constante, y con un costo humanitario enorme

El expositor subrayó la preponderancia de cuatro Estados en la región: Turquía, Irán, Israel y Arabia Saudita (único árabe de los cuatro). También, mencionó el hecho de que en la región sigue existiendo una gran presencia de potencias extra-regionales, como es el caso de Rusia y Estados Unidos.

La política exterior de Estados Unidos, según explicó Molteni, tuvo un impacto muy importante en la dinámica existente entre Arabia Saudita e Irán. A grandes rasgos, la política exterior de Obama consistió en evitar otro Afganistán e Irak, razón por la cual "su acción fue tratar de no intervenir militarmente, salvo en aquellos casos en los cuales estuviera comprometido un interés directo de Estados Unidos", esto fue el postulado básico; el país no podía enfrentar nuevamente el costo económico y humano que una nueva guerra traería. El Embajador destacó que Estados Unidos sólo intervendría bajo dos supuestos: si se pone en peligro la seguridad de Israel y si un grupo terrorista presentase una amenaza letal para la existencia estadounidense. En caso contrario, Estados Unidos actuaría en un contexto multilateral.

El Embajador aludió al hecho de que dicho postulado básico fue adecuándose conforme a los hechos que así lo demandaban. Así es como se comprende el rol que jugó el gobierno de Obama en la Primavera Árabe (2010-2011), proceso mediante el cual ciertos países enfrentaron severos cambios: Túnez, Egipto, Libia y Siria. El expositor mencionó el positivo resultado del primero, el fracaso de Egipto, la intervención estadounidense en Libia, para pasar así a centrarse en la situación de Siria. En este último caso puso en evidencia el fracaso americano (Al Assad no cayó como Mubarak, al contrario, reforzó su poder), así como el claro enfrentamiento entre Arabia Saudita e Irán.

Si bien el elemento religioso tiene importancia, en realidad Arabia Saudita e Irán son países que están luchando por un control del dominio geopolítico de la región

Molteni señaló que la raíz del enfrentamiento entre Arabia Saudita e Irán se remonta al siglo VIII, cuando se dividió el mundo musulmán en sunnitas (el 85% de la población musulmana actual) y chiítas (el 15%). Con la Revolución de 1979, Irán instauró un gobierno chiíta, subordinando así el control del poder estatal al clero. Arabia Saudita, por el contrario, es mayoritariamente sunnita, como también lo es Egipto y Turquía. Irak es principalmente chiíta, pero tiene grandes divisiones internas con sunnitas y kurdos.

El Embajador enfatizó que dicha división no es meramente por asuntos religiosos; "si bien el elemento religioso tiene importancia, en realidad Arabia Saudita e Irán son países que están luchando por un control del dominio geopolítico de la región". Lo más importante es la confrontación estratégica entre los Estados.

Ante esta situación, Obama ha desarrollado una política más de retracción sobre Medio Oriente. Para Molteni, esta "falta de énfasis en la prioridad" creó un vacío de poder que ha potenciado los enfrentamientos regionales. La retirada militar americana está permitiendo el surgimiento de nuevos actores, como lo es la consolidación del Estado Islámico (EI) en Irak, el cual comenzó a operar en Siria, agravando la guerra civil que vive ese país.

Dicho conflicto es empeorado por la presencia de numerosos actores en el área. Por un lado operan países fuertemente sunnitas, como lo son Arabia Saudita y estados del Golfo Pérsico que se oponen al régimen de Al Assad. Por el otro está Turquía, cuya gran preocupación por el factor kurdo deviene en una postura fuertemente ambivalente ante la política siria (apoyo y oposición). No hay que olvidar la intervención de Rusia, quien envió aviones y una fuerza de 4.000 hombres en defensa del gobierno de Al Assad. También mencionó la coalición de 64 Estados liderada por Estados Unidos con el fin de eliminar al Estado Islámico, principalmente mediante vehículos no tripulados. Israel es otro actor parcialmente involucrado en el conflicto, dada su preocupación ante la intervención del Hezbollah.

Molteni exaltó la división del territorio sirio en cuatro regiones: el oeste controlado por Al Assad, el norte en manos de los kurdos, el este dominado por el EI, y finalmente el sur en posesión de fuerzas sunitas opuestas a Al Assad. Siria vive un triple conflicto: por un lado, el gobierno con las fuerzas opositoras; por el otro, el gobierno con los kurdos; y finalmente el intento por destruir al EI. En este momento rige un cese al fuego en el marco de Naciones Unidas, pero hay una gran incógnita sobre qué es lo que va a pasar.

Luego de explicar la situación siria, Molteni se refirió a Yemen como otro escenario en donde el enfrentamiento entre Arabia Saudita e Irán es evidente. En este país, los hutíes que estarían apoyados por Irán avanzaron contra el gobierno constituido, razón por la cual Arabia Saudita intervino militarmente. Esto demuestra, nuevamente, la disputa de liderazgo en la región.

Otro aspecto agravante en la situación de Medio Oriente está relacionado con el pacto nuclear del G5+1 con Irán, mediante el cual se le permite al país desarrollar su programa nuclear sometiéndolo a controles. Si bien se limita la capacidad nuclear iraní durante los primeros trece años, los compromisos adoptados no logran satisfacer las expectativas de los diferentes actores regionales.

Molteni concluyó que en Medio Oriente se vive una situación muy complicada, donde existe una gran tensión entre los Estados. Dijo que hay que analizar los conflictos de la región ante la actual baja del precio del petróleo, ya que la mayoría de estos países son productores y exportadores de dicho producto. Ante este nuevo escenario hay que evaluar qué poder tendrá Arabia Saudita de intervenir en Siria o proteger el régimen egipcio cuando sus recursos económicos se vean mermados. Lo mismo ocurre con Rusia. Además, ya que Irán y Estados Unidos han aumentado su producción, es relevante analizar qué consecuencias tendrá este hecho.

Finalmente, Molteni señaló la gran importancia de Medio Oriente para la Argentina, reforzada mediante lazos compartidos, sobre todo con el pueblo judío, sirio y libanés.

Atilio MolteniAbogado (UBA) y Diplomático de carrera. Embajador argentino ante el Estado de Israel entre 2003 y 2010. Anteriormente prestó servicios en Naciones Unidas, organismos internacionales en Ginebra, embajadas en el Reino Unido, México y Japón y se desempeñó como Embajador en Suecia y Turquía