25 de abril de 2019

Mesa-debate con la participación de Rafael Bielsa, Marcelo Cantelmi y Jorge Castro

Por Giselle Martín Romero

En el marco del ciclo de conferencias "El mundo que viene y cómo se inserta la Argentina", organizado por el Comité de Cultura del CARI con el auspicio de la UNESCO y la Fundación Ortega y Gasset, se abrió a debate el estado de los valores en el orden internacional.

Encargado de moderar la mesa, el Embajador Eduardo Sadous presentó y dio la palabra al Dr. Jorge Castro quien resumió su presentación en dos puntos: en primer lugar, resaltó que el acuerdo llevado a cabo en Buenos Aires entre Donald Trump y Xi Xinping hace caso principalmente a la seguridad y sólo de forma subsidiaria a lo comercial, y que el mismo constituye un factor de certidumbre en un contexto global de grandes fluctuaciones. Esta incertidumbre en el sistema internacional, en el marco de una economía mundial en expansión, se debe al advenimiento de la cuarta revolución industrial en la historia del capitalismo, la cual consiste en "la informatización completa de las manufacturas y los servicios".

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Como segundo punto, afirmó que "efectivamente hay una crisis de valores de la envergadura del sistema mundial" que se debe a que el excepcional crecimiento de la economía mundial y la revolución industrial encabezada por Estados Unidos y China, son resultado del éxito de la razón instrumental como núcleo del sistema capitalista. El Dr. Castro sostuvo que el problema de la revolución de la técnica, basada en la razón instrumental, es que puede explicar el cómo hacer pero que carece de respuestas sobre la razón de fines y de valores que fundamenten a la sociedad global que ha concebido. Finalmente, el analista destacó al Papa Francisco como el motor de la lucha destinada a orientar los valores que funden la nueva sociedad global creada por la revolución de la técnica.

Luego, el Embajador Sadous introdujo a Marcelo Cantelmi cuya presentación inició con la reflexión de que el mundo se encuentra en una situación figurada de guerra y, citando a Angela Merkel, sostuvo que el orden mundial está en decadencia y a al filo de la destrucción debido a la debilidad y decadencia de los principales líderes que dirigen la política mundial. Para ilustrar este punto mencionó el Brexit como expresión principal de la deformación del sistema mundial desde el inicio de este siglo que, para él, comenzó con el estallido de la economía mundial en el 2008.

Para Cantelmi aquella crisis fue la causante de la transformación de los parámetros en los cuales vivimos: adelantando el lugar de China y desplazando a Estados Unidos y Europa, y dejando muchos individuos frustrados y fuera del sistema cuya expresión se manifiesta en el surgimiento de extremismos antisistema de ultraderecha o ultranacionalistas.

El Brexit sumado a la guerra entre Estados Unidos y China han provocado el detenimiento del crecimiento de la economía mundial desde 2016, cuando comienzan los conflictos entre las superpotencias. Según afirmó Cantelmi "el fenómeno de estas tensiones comerciales no solamente detiene el circuito de la economía mundial, sino que está produciendo un añadido de desgracias para la periferia mundial" como las crisis de las monedas y el emergente de populismos.

El expositor planteó que la incertidumbre se da por el desconocimiento respecto de la reacción norteamericana que, si bien por un lado busca aliviar la crisis a fin de evitar el impacto político interno, por otro se enfrenta comercialmente a Europa, que debería ser la principal aliada de Washington frente al conflicto con China. En palabras de Cantelmi, este desorden "lleva a reflexionar sobre los parecidos con otras épocas lamentables, sobre todo el período de entre guerras".

Finalmente, tras resumir su historia académica, el Embajador presentó a Rafael Bielsa quien se centró en las continuidades que seguirán vigentes en el devenir de occidente, entre ellas el orden globalizado del mundo y la vertiginosidad de los cambios. Esto último ocasiona y, a la vez, explica la "poquedad de los liderazgos" ya que "resulta imposible desempeñar una función ejecutiva y al mismo tiempo mantenerse, no ya formado, sino informado".

Para el Dr. Bielsa, la velocidad de los cambios no sólo afecta a los líderes mundiales sino que perturba otras esferas alcanzando a todos los individuos con "profunda implicancia ética". Para ilustrar estas consecuencias, el expositor mencionó cómo la manipulación del genoma humano ha despertado un debate valorativo dentro de la comunidad científica sobre cuando un embrión puede o no ser descartado; y cómo durante la disputa interna por el Brexit se utilizó la big data de forma tal que se atentaba contra la democracia. Para el Ex Ministro "estos problemas van a aparecer cada vez en mayor escala".

Por otro lado, marcó la crisis económica de 2008 como un punto de fractura en el que la apropiación financiera triunfó por sobre la apropiación productiva, donde el atributo de la propiedad es más valorado que el atributo del ser.

"Hay perplejidad, enojo, decepción y finalmente desmoralización", según el Dr. Bielsa, en una sociedad que en la que se practica una moral nueva de la que surgen liderazgos conservadores populistas "con fuerte carga religiosa". Estos nacionalismos suponen una fractura de la continuidad en términos de los derechos garantizados por las constituciones liberales. Para Bielsa "vamos a vivir tiempos muy turbulentos".