Tres ideas acompañan la presente reflexión. El Status quo territorial está cambiando. El espacio terrestre es relativamente fijo y las presiones en términos de ocupación tradicional han cedido en tanto las guerras ofensivas expansivas son cada vez más costosas debido a: a) La creciente capacidad de resistencia material por parte de los actores terrestres; b) una mayor urbanización; c) los medios de comunicación y la necesidad de cierta legitimidad de base o construida para iniciar una campaña militar que involucre tomar territorio.