El G20 en 1999, como el G7 en 1975, fue creado en tiempos de turbulencias mone tarias y crisis financieras cuando la creciente complejidad de la interdependencia en el proceso de integración financiera internacional exigía enormes esfuerzos de cooperación global. Para tal objetivo, Kirton señala que, ante la incapacidad de los organismos tradicionales para proveer la estabilidad global, el G20 se propuso abrir espacios de diálogo y cooperación entre los países de mayor importancia sistémica del mundo desarrollado y en desarrollo al reconocer la transformación en las relaciones internacionales de tiempos recientes (2011, pp. 55-57).