La Gendarmería Nacional tiene notas distintivas que permiten calificarla como una fuerza intermedia. La naturaleza militar de sus integrantes; la sujeción a determinados valores, principios y normativas; y su ubicación en el concierto de las instituciones del estado demuestran que la Gendarmería Nacional no es una policía común. Tampoco es una Fuerza Armada como lo son el Ejército, la Armada o la Fuerza Aérea.