Los Diplomáticos
Nº 25. Carlos Manuel Muñiz

PRÓLOGO, por Francisco de Santibañes.
Al poco tiempo de asumir la presidencia del CARI, tuve la alegría de recibir los primeros diálogos que describen, en esta obra, a nuestro fundador: Carlos Manuel Muñiz.
Como bien reflejan estas entrevistas y el excelente texto de Rosendo Fraga, Muñiz no solo fue uno de los grandes diplomáticos del siglo XX, sino también un hacedor. Creador del CARI y del ISEN, impulsó la construcción de instituciones que durante décadas han estado al servicio de los intereses de la nación. En todo momento buscó construir puentes que unieran a la Argentina con el resto del mundo y asumió, como miembro de la dirigencia argentina, la tarea de identificar, formar y promover a los futuros líderes. Siempre guiado por el pluralismo, generó en el CARI un espacio en el que todos los sectores se sintieron –y se sienten– bienvenidos para dialogar sobre aquellos temas que hacen a nuestra política exterior y a las relaciones internacionales. Esta continuidad en el tiempo se debe a la sabiduría de Muñiz y sus colegas, quienes supieron impregnar al Consejo de una serie de valores que lograron subsistir más allá de los avatares de la política y la economía argentina.
El relanzamiento de la serie Los Diplomáticos debe, por lo tanto, ser entendido como un homenaje a Muñiz, ya que fue durante su presidencia cuando decenas de biografías resaltaron el rol que los diplomáticos argentinos han jugado en la república. Recuerdo que, en una conferencia en la Academia de Ciencias Morales y Políticas, el mismo Fraga definió a Muñiz como su maestro a pesar de no haber sido su profesor. Mi homenaje también a Rosendo, quien es y seguirá siendo un digno continuador de la obra de Muñiz.